troncos forestGabón y el desarrollo de la industria forestal

La industria forestal ha sido un elemento clave de la economía de Gabón, que en la actualidad se beneficia de una serie de medidas específicas, que incluyen el apoyo a las pequeñas y medianas empresas (PYME), mejora de la formación de profesionales en el rubro madera, y la creación de una oficina para garantizar la industrialización del sector.

La selva tropical en la cuenca del río Congo, que cubre el 85% del territorio nacional, ha convertido la industria de la madera en la segunda fuente de ingresos para el Estado, después del petróleo, representando el 5% del PBI, según datos oficiales del año 2014.

En el año 2009 se extrajeron 2 millones de metros cúbicos de madera, de los que 1,7 millones fueron exportados en forma de troncos.

 

Entre 2010 y 2011 las exportaciones aumentaron un 39.2%, convirtiéndose, la explotación maderera en el subsector más importante del sector primario gabonés, siendo el principal empleador del sector privado, ya que emplea al 28% de la población activa. Actualmente, Gabón produce 3 millones de m3 de madera al año, principalmente okumé.

En febrero del año 2012, se anunció la construcción, en Owendo, puerto de Libreville, una planta de elaboración de la madera producida en Gabón. El anuncio fue realizado por la  'Sociedad Nacional de Maderas de Gabón' (SNBG) que para construir la fábrica obtuvo un préstamo  de 13,7 millones de euros del Banco de Desarrollo de los Países del África Central (BDEAC) y del banco privado gabonés 'Ecobank'. Según lo publicado en la prensa local e internacional, la construcción de la planta fue financiada en un 80% con fondos de la misma SNBG.

Desde noviembre del 2010 está prohibida la exportación de maderas no elaboradas, para favorecer el desarrollo de la industria local. La medida ha suscitado críticas incluso de expertos del sector. A pesar de disponer de uno de los más ricos patrimonios forestales del continente, con una superficie de 20 millones de hectáreas, Gabón sólo saca de la producción maderera el 3 o 4 % de su Producto Bruto Interno. La explotación de tres cuartas partes de las selvas vírgenes ha sido dada en concesión a empresas privadas extranjeras que exportan sobre todo troncos sin elaborar, y sólo el 30% de la madera es elaborada en el país. El sector maderero proporciona 15.000 puestos de trabajo directos y 5.000 indirectos y es el segundo empleador después del sector petrolero.

En el 2010 el gobierno estableció un fondo de apoyo a la industrialización para promover la modernización de la elaboración de la madera en el país, con el fin de que se exporten sólo productos elaborados o semielaborados, con un mayor valor agregado.

El 15 de mayo de 2010, comenzó la prohibición estatal de exportación de madera en rollo, y se ha pasado a exigir que el producto fuese transformado en el país. En este sentido, el Gobierno firmó un acuerdo estratégico con OLAM Internacional, empresa de Singapur, para el desarrollo conjunto de una Zona Económica Especial para procesamiento de madera en Nkok, que es una zona franca de inversión cercana a Libreville, de una extensión de 1.400 Ha. con incentivos fiscales, arancelarios y de suministro de energía, y que está siendo actualmente urbanizada para acoger inversores (por parte de la empresa francesa Cogedor y Ramky, de la India), en principio de explotación maderera, aunque está abierta a otros sectores. El estado gabonés quiere que se convierta en el impulsor de la economía, en especial de los sectores que no sean de hidrocarburos, con la intención de diversificar la economía y atraer inversión extranjera. La Zona consiste en una Joint Venture del Gobierno gabonés con el grupo Olam, en la cual la multinacional con sede en Singapur, posee el 60% de las acciones.

La iniciativa forma parte del interés por incrementar la competitividad del país, atraer empresas extranjeras y crear empleo para la población local. Según fuentes gabonesas, desde la prohibición, se han generado 7.000 puestos directos e indirectos. Además, desde el 1 de enero de 2010, también está prohibida la exportación de troncos, con el objetivo de promover el valor agregado nacional en el sector.

El 85% de la superficie del país está cubierta por bosques y selva tropical, lo que supone alrededor de 213.334 kilómetros cuadrados. Se estima que existen unos 400.000 metros cúbicos de reservas de madera comercial en el país. De esta cifra, aproximadamente un tercio lo forman las apreciadas especies de madera de Okumé, que tienen una tasa de regeneración potencial del 1 ó 2% anual.

Unas 300 compañías se encargan de la explotación de 65 especies, de las 400 existentes en Gabón. El sector ha estado dominado tradicionalmente por compañías francesas, aunque en los últimos años se ha incrementado la presencia de empresas chinas y malayas. Según estimaciones del FMI, la cifra de exportación de madera en 2015, aportó un total de 406 millones de euros. En el año 2015 las rentas forestales representaban el 2,89% del PIB.

En los últimos diez años, Gabón ha atravesado por un profundo proceso de reforma en relación con los bosques y el medio ambiente. Se promulgó una nueva ley forestal que destaca la OFS como el enfoque general en la ZFP. La actividad forestal es, y seguirá siendo, uno de los pilares del desarrollo económico y social de Gabón.

El sector privado ha pasado a ser un importante impulsor del desarrollo forestal industrial y la exportación de productos forestales. El gobierno ha implantado un sistema para institucionalizar la silvicultura comunitaria como una forma de satisfacer las necesidades locales de madera y otros productos forestales. Gabón tiene una baja tasa de deforestación y bosques con abundancia de especies maderables valiosas y se cuenta entre los países con mejores posibilidades para desarrollar una industria forestal sostenible y próspera. Sin embargo, existen algunos problemas, principalmente de gobernabilidad. Por ejemplo, se observa un nivel limitado de defensa civil y contados procesos participativos en el sector forestal. La ordenación de áreas protegidas en Gabón aún se encuentra en sus etapas preliminares y se necesita una mayor planificación y un control efectivo del cumplimiento de la ley.

Puntos clave

Gabón posee extensos recursos forestales con abundancia de especies maderables y un nivel relativamente bajo de conversión para otros usos.
 La ZFP de Gabón es de aproximadamente 13,3 millones de hectáreas, que comprenden 10,6 millones de hectáreas de bosque natural de producción, 2,70 millones de hectáreas de bosque de protección y 25.000 hectáreas de plantaciones.
Se estima que por lo menos 1,48 millones de hectáreas de la ZFP natural de producción se encuentran bajo ordenación sostenible. Se calcula que hay por lo menos 1,09 millones de hectáreas de la ZFP de protección bajo este tipo de ordenación.
La viabilidad financiera de la OFS se ve sumamente facilitada por la alta calidad y cantidad de una especie noble (okoumé) en una extensa área de la zona forestal, especialmente en las planicies costeras.
Sin embargo, debido a su alto valor, el okoumé se suele sobreexplotar.
Es posible establecer bosques comunales en las zonas forestales rurales, pero hasta 2004 sólo se habían establecido unos pocos.
En teoría se establecieron normas muy estrictas para la gestión de las concesiones, pero éstas aún no se han introducido o aplicado totalmente. Existe un interés en la aplicación de C&I como herramienta de control y se ha alentado la certificación forestal.
Muchas áreas protegidas del país no parecen estar manejadas de forma eficaz.
Las prácticas de manejo para la producción de carne de caza y otros PFNM siguen en su mayor parte sin controlarse en las concesiones forestales.

El Banco Mundial estima la población activa en el año 2014 en 645.573 personas, con una tasa de crecimiento del 2,8%. Por su parte, la FAO estima que en 2014 el 24% de la población activa se dedicaba a la agricultura, llegando al 33% en el caso de las mujeres. El sector forestal es considerado como el segundo empleador del país (más de 20.000 trabajadores), por detrás de las administraciones públicas.
Nota elaborada a partir de informes de ITTO (Internacional Tropical Timber Organization), la FAO, la Secretaría de Comercio de España, y el Banco Mundial.

UY-PRESS - Montevideo - URUGUAY - 05 julio 2018