Los malabares que están haciendo UTE y Ancap para generar energía y no parar la refinería por la sequía
La estatal busca evitar el impacto del agua salada en el proceso de refinación de los combustibles.El déficit hídrico que enfrenta el país, junto con el aumento de la salinidad del agua provista por OSE en Montevideo y el área metropolitana, han provocado problemas en el proceso de refinación de combustibles de Ancap. El aumento de la salinidad intensifica el proceso de corrosión de la refinería de La Teja, por lo que la estatal busca alternativas para evitar el uso de esa agua.
Por ese motivo, Ancap ultima detalles para trasladar agua dulce del Río Uruguay, en los barcos que usualmente utiliza para transportar gasoil a la planta que Ancap tiene en Paysandú.
Esa agua será trasladada al puerto de Montevideo y depositada en la unidad potabilizadora que OSE le prestó a Ancap y cuyo funcionamiento iniciará el próximo lunes.
“Estamos evaluando todas las contingencias que pueda haber para esta maniobra y pensamos que si todo sale bien, la semana que viene ya traeríamos el agua”, afirmó en diálogo con El País el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic.
En una primera instancia, la estatal traerá un barco con 10.000 metros cúbicos (m3) de agua desde el Río Uruguay, la cual será depositada directamente en la unidad potabilizadora para ser tratada y posteriormente, se evaluará la posibilidad de realizar más viajes.
Para poder acumular más cantidad de agua, el objetivo inicial de Ancap era limpiar los tanques de gasolina que tiene en la refinería de La Teja, exportar ese combustible y así poder obtener más espacio de almacenamiento.
Sin embargo, Stipanicic dijo que los precios que el mercado ofrecía pagar por esa gasolina “eran absurdos”, por lo que esa idea está descartada por el momento.
En relación al costo de esta maniobra, el presidente de la estatal dijo que lo único por lo que deben pagar es por la limpieza de las bodegas de carga de los barcos, las cuales deben ser acondicionadas tanto para recibir agua, como para poder recibir combustible nuevamente. No obstante, Stipanicic indicó que el costo “es totalmente irrelevante para la situacion (de déficit hídrico) que estamos viviendo”.
Entre el viaje de ida y vuelta y la descarga del agua, la operación tendrá una duración de entre tres a cuatro días, aproximadamente.
Otra de las soluciones que está implementando Ancap para mitigar el impacto negativo de la salinidad del agua, es comprarle agua tratada a UTE.
Según indicó el director de UTE, Felipe Algorta a El País, al 15 de mayo, la empresa de electricidad le llevaba vendidos unos 20.500 m3 a Ancap, a un precio de US$ 6 por m3. Por lo que estiman que hasta el momento, UTE ha recibido en el entorno de US$ 123.000 por concepto venta de agua tratada (en la central térmica de Punta del Tigre) a Ancap.
Sin embargo, Stipanicic señaló que los 8.000 m3 de agua por día que UTE le está vendiendo a Ancap, “es una cantidad ínfima” en comparación con la que se necesita en la refinería. Por ese motivo, el jerarca remarcó la importancia del traslado de agua dulce desde el Río Uruguay como la opción más significativa.
Además de la instalación de la planta potabilizadora de agua, del traslado de agua desde el Río Uruguay y de la compra a UTE, el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini, manifestó este miércoles que Ancap “está también trabajando con un aparato de ósmosis inversa para desalinizar el agua”. Dicho aparato fue prestado por UTE, pero también “tiene un caudal menor al necesario, así que no alcanza”, detalló el ministro.
Con esta serie de medidas, las autoridades estiman que la refinería de La Teja va a seguir funcionando con normalidad.
“Es una coordinacion logística bastante importante y atípica para nosotros. Queremos empezar con la operativa ya la semana que viene”, afirmó Stipanicic en relación a la extracción de agua del Río Uruguay.
El aumento de la salinidad del agua que brinda OSE en la capital del país y zonas de Canelones, ya ocasionó problemas en la refinería de La Teja. Según Stipanicic, en este momento hay problemas en la torre de enfriamiento de la refinería, aunque dijo que esa situación “es solucionable y menos grave” que la que se presenta en la operativa de generación de vapor.
En ese caso, la generación de vapor que la refinería necesita para controlar la temperatura de los procesos, requiere de agua de muy alta calidad y requerimientos específicos, por lo que deben evitar el uso de agua salada en ese proceso.
UTE
Si bien UTE está contribuyendo con Ancap para enfrentar el déficit hídrico mediante la venta de agua tratada, también enfrenta problemas en su interna ante la escasez de lluvias. En su caso, precisa comprarle gasoil a Ancap para la generación con energía térmica. En los primeros tres meses del año, la empresa estatal lleva gastados unos US$ 150 millones en compras de combustibles para el funcionamiento de sus centrales térmicas, cuando el presupuesto inicial para eso era de US$ 170 millones en todo 2023.
Por este motivo, UTE analiza en estos días la posibilidad de solicitar un crédito de contingencia por US$ 90 millones a bancos nacionales y del extranjero. Así lo afirmó Algorta al ser entrevistado por el programa radial Quién es Quién, de Diamante FM.
Eventualmente, si con ese dinero no alcanza, la estatal podrá aportar menos utilidades a Rentas Generales, algo que ya dialogó con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP).