Aumentó el monte nativo en Uruguay

monte nativo
En el último quinquenio, multas por tala indiscriminada de monte nativo es próxima al millón de dólares.
La Dirección Forestal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca tiene como objetivo defender, mejorar, ampliar y crear recursos forestales. En pos de lograr esos objetivos, en los últimos años se ha valido del incremento de acciones e inspecciones técnicas, generando una red de trabajo compuesta por la Brigada Especial para la Prevención y Represión del Abigeato (Bepra), intendencias departamentales, guarda parques y Ongs. Además, se efectúan vuelos periódicos y se utilizan imágenes satelitales. En la tarde de ayer, en las instalaciones del Mgap, la Dirección Forestal de la cantera informó que fruto de dicha cooperación Uruguay aumentó su bosque nativo a 800 mil hectáreas, “que actualmente es permanente y creciente”, afirmó el Ing. Agr. Pedro Soust, director de la dirección. De este modo, nuestro país, junto a Chile y Costa Rica, se destaca respecto al resto de latinoamericano.

Se tratan de bosques -ribereños, galerías y serranías- nativos de rebrote, también conocidos como renovales, árboles que su fuente original fueron árboles previamente talados. Sin embargo, muchos de ellos están sufriendo la invasión de ligustros y fresnos, por lo que el Mgap permite el ingreso a los mismos para la tala de las especies invasoras.

CERCA DE UN MILLÓN DE DÓLARES EN MULTAS
La multa actual es muy dura en relación a su precedente y ha ayudado a combatir la tala. Se pasó de 400 dólares por toda la operativa ilegal a una cifra calculada por hectárea afectada que asciende a 2.400 mil dólares. Producto de ello es que desde el año 2010 al 2014 se efectuaron multas, ya sea transporte de madera indocumentada o talas indiscriminadas, por 788 mil dólares. Además, hay otras multas que se están procesando que podrían agregarle a la cifra primaria unos 200 mil dólares más. Según explicó Soust, no es lo mismo un montarás que lleva un carro con leña, y que de ello puede depender el alimento de su familia, a un número importante de hectáreas ganadas a la ribera de un río o una serranía para cultivar. Se busca “ser rigurosos y ejemplificantes”.

Actualmente están abocados a la cuenca del río Santa Lucía con grandes mejoras, ya que pasó de 30 mil hectáreas de bosque nativo a comienzos del siglo a 56 mil hectáreas en 2012. “Esto no significa que no hayan puntos donde hubo infracciones (de la Ley Forestal)”, aclaró el director.

Uruguay mediante la reposición de ejemplares ha reducido el efecto invernadero por deforestación y degradación. Es por ello que Soust, para finalizar, insistió que hay servicios ecosistémicos que benefician el medio ambiente y la vida del hombre, por lo que la prohibición de la tala de bosque nativo no es un mero capricho.

TODO EL CAMPO - Montevideo - URUGUAY - 28 mayo 2015