PlayaSere Entrada carmelo fotoElEcoCarmelo sin rumbo turístico

Por Gabriel Monteagudo
Carmelo necesita un plan estructural en materia de turismo que proyecte su desarrollo en los próximos 20 años.

Hace falta un plan formal, completo y redondeado para desarrollar Carmelo desde el punto de vista turístico e impulsarlo hacia el futuro.
Para ello se necesitan decisiones políticas, pero también hacen falta emergentes sociales que libren la batalla de ordenar las ideas fragmentarias y los proyectos puntuales para reubicarlas en un plan maestro. El mismo deberá incluir ideas complejas, como la construcción de una rambla hasta el Balneario Zagarzazú, o la extensión de la rambla desde el puente arroyo arriba, hasta proyectos concretos como la recuperación costera y la mejor utilización de nuestros sectores de playa.

Cosas sencillas
Dos ejemplos: a raíz de mi primera visita, años atrás, a la ciudad de Colón, Entre Ríos, cada semana recibo un informe sobre actividades y propuestas turísticas de esa ciudad directamente desde la Secretaría de Turismo, con ofertas hoteleras, actividades artísticas, descuentos en comercios y eventos. Jamás pasé por la Secretaría de Turismo de Colón, pero evidentemente existe un mecanismo que detecta a los turistas y los mantiene enlazados informativamente con la ciudad.

¿Cuántas personas fuera de Carmelo reciben un boletín con propuestas turísticas de nuestra ciudad de parte de nuestros organismos estatales o comisiones de turismo?

Otro caso menos trascendente, pero igual de importante: en mis caminatas por la Ruta 97 es frecuente que me detenga algún vehículo con gente que no es de la zona, preguntando dónde queda el Balneario Zagarzazú, el hotel Four Seasons, o alguno de los emprendimientos turísticos entre Carmelo y Nueva Palmira. “Vuelva hasta la rotonda, doble a la derecha y vaya por Ruta 21” es mi repetida indicación.

Evidentemente, falta cartelería señalizadora sobre la ruta que indique claramente por dónde seguir cuando uno llega a la rotonda de Dante Alighieri.

Apenas dos banalidades que muestran un problema más profundo: carecemos de un plan a largo plazo con aspectos definidos para el desarrollo turístico de nuestra ciudad y donde la iniciativa privada, principalmente hotelera, es lo único destacable en esta área.

Otras no tanto
No es un tema en el cual la responsabilidad caiga solo en el Municipio, ni solamente en la Intendencia, sino que la sociedad civil carmelitana parece inmóvil a la hora de elaborar una estrategia que permita ampliar, dar a conocer y potenciar nuestra oferta turística.

Para completar la idea, les cuento que el sábado me llamó una lectora de Colonia que quería saber el número de un hostel en Carmelo para venir a quedarse de pasada con un grupo de amigos. “Abre en diciembre y es el único que hay”, le dije.

Otras dos cosas puntuales que tienen que ver con cuestiones que hemos planteado desde EL ECO: el cartel que cruza la Ruta 21 en el acceso Este a Carmelo fue cambiado luego de que en EL ECO contamos y mostramos con una fotografía que las letras que habían colocado eran demasiado chicas para ser vistas por un conductor cuando llegaba a la ciudad. Hoy la señalética es de letra grande y clara.

En otros temas no hemos tenido suerte con la prédica: los parrilleros detrás de Prefectura siguen tan rotos como el año pasado, que estaban tan rotos como el anterior y el anterior.

La intención no alcanza
Otra pregunta sobre nuestra inexistente política de desarrollo turístico: si usted llega a Carmelo por Ruta 21 y quiere entrar por Blandengues hacia la Playa Seré ¿por cuál de los carriles que recientemente se construyeron tiene que ingresar? Por el primero no, porque está señalizado, pero los demás no dicen nada. Supuestamente, sería el tercero, pero no hay cartel que lo indique.

Otra vez llega el verano y los paradores están con la licitación por salir, por lo que el concesionario terminará, con suerte, tomando posesión de los mismos en febrero o marzo. La iniciativa municipal para licitarlos por cinco años es buena, pero no es suficiente. Iniciativas de la gente, como la vendedora de licuados o los de tortas fritas, tapan la falta planificada de servicios.

Pese al esfuerzo del Municipio en la limpieza de la playa, los juncos siguen avanzando sobre la costa. Pero además nadie parece haber tomado nota de lo que dijo una de las técnicas que estuvo desarrollando aspectos del Plan Local, esa que habló de colocar barreras de hojas de palmera para recuperar la arena que está desapareciendo a lo largo de toda la Playa Seré. Un consejo que, dado el viento y las crecientes de esta época, habría que haber corrido a realizar. Además de efectivo, no representaba erogación económica alguna.

Como viene iluminándose la ruta entre Carmelo y Colonia es más probable que se coloquen luces a todo lo largo del trayecto antes que se pongan focos en la zona costera que va desde Grito de Asencio casi hasta Punta Piedras. Luces, asfalto, una rotonda, una batería de churrasqueras, harían de esa zona un lugar espectacular para disfrutar de los días veraniegos. Los baños construidos frente al sector llamado Playa Loca son un buen aporte para continuar desarrollando toda esa zona.

Del camping mejor ni hablar, porque ya lo hemos reclamado en innumerables notas anteriores.

Es muy difícil que una sucesión de administraciones blancas como hemos tenido en Colonia, incluso esta última, con un alto porcentaje de jerarcas de Carmelo, logre armar algo de esto, sencillamente, porque le ha ido bien reaccionando ante reclamos puntuales y tapando baches cuando ya desde la gente se escucha una queja permanente.

Y Montes del Plata
La política que nos gobierna es la política del talenteo: todos justifican por qué no se hicieron las cosas que se deberían haber hecho, mientras los ciudadanos escuchan declaraciones, pero no ven obras. El fracaso municipal sobre la utilización de las barracas de Montes del Plata una vez terminada la obra era un final anunciado. Todos sabíamos que la Intendencia no iba a poder gestionar tremenda obra (ver nota al edil Carlos Puche) y así lo planteamos en EL ECO cuando supimos que las barracas y toda su infraestructura quedarían para la Intendencia. Hoy, la situación concreta es que la Intendencia ya no puede pagar la seguridad en el lugar y no tiene ni idea de qué hacer con eso. Allí, en la zona de Lomas, lo más probable es que los yuyos terminen ganando una vez más la batalla contra la ineficiencia municipal.

Cambio de aire
Además de un cambio político, se hace necesario trabajar rejuntando ideas sueltas, imaginando otras y teniendo la audacia de soñar y estampar todo en un plan global para el desarrollo turístico de Carmelo, que piense un “Carmelo: desde los 200 a los 300 años”.

Cambiar para cambiar la corriente de ideas existentes se hace impostergable para que el futuro turístico de Carmelo no termine siendo una imagen de nuestras calles: una sucesión de pozos emparchados que parece nunca acabar.
 
Nota del autor: permítaseme dedicar esta nota a algunos carmelitanos que se extrañan en el pienso turístico colectivo, como Eduardo Arbeleche y Ademar Duarte.


Periódico EL ECO digital - Nueva Palmira -  URUGUAY - 20 noviembre 2014