tren vagonGobierno dio paso clave para encaminar el tren de UPM

Después de un largo período en el que se vio acosado por cierta inactividad, inoperancias y pugnas internas que dificultaron su andar, el gobierno de Tabaré Vázquez levantó cabeza este martes y le dio un empujón importante al tren de UPM2 que implicará una inversión de US$800 millones. Es así que representantes del Poder Ejecutivo abrieron este martes el sobre que contenía la oferta del consorcio Vía Central –integrado por Saceem, Berkes y Sacir (España) y NG (Francia)– para la construcción de 273 kilómetros de vía férrea entre el puerto de Montevideo y Paso de los Toros (Tacuarembó). El Poder Ejecutivo prevé iniciar en enero de 2019 la obra clave para la instalación de una nueva planta de celulosa de UPM y las obras se extenderán por un plazo de 36 meses.

 

El proyecto es impugnado por Acciona, una empresa descartada de la licitación y que ya presentó un recurso administrativo. Diego Pini, jerarca de la empresa que quedó por el camino, asistió al evento de la apertura  y dijo en rueda de prensa que la oferta de Acciona era 8,3% más barata que la única que hoy sigue en carrera, es decir, US$ 168 millones menos. “La oferta del grupo Acciona es la mejor calificada técnicamente y sensiblemente más barata”, aseguró Pini, que es el director para América Latina de la constructora. “Ejerceremos todas nuestras acciones para hacer valer nuestro derecho”, agregó el empresario.

Acciona fue descalificada, según sus representantes, por no cumplir con un requisito que no estaba contemplado en el pliego original: la autorización de su casa matriz. El ministro de Transporte y Obras Públicas, Víctor Rossi, no quiso responder públicamente sobre estas objeciones ni sobre la posición de Acciona, aunque aseguró que el recurso presentado “no tiene efecto suspensivo” sobre la licitación. Pini afirmó que a su entender se realizó “una interpretación torcida de las bases”, e insistió en que el respaldo de la casa matriz fue documentado debidamente. Acciona ya presentó un recurso administrativo de tipo jerárquico que irá al Poder Ejecutivo, y además analiza realizar otros movimientos “en los ámbitos nacionales e internacionales”.

Por otra parte, Rossi advirtió que todavía restan superarse etapas en el proceso de evaluación del proyecto del Ferrocarril Central del consorcio que sigue en carrera, como la aprobación del Tribunal de Cuentas de la República, y el análisis de una consultora externa contratada por el gobierno.

Rossi sostuvo también que se trata de “una obra muy ambiciosa y exigente” para el gobierno, que no solo contempla la obra ferroviaria propiamente dicha, sino también otras aledañas como la construcción de paradas, estaciones, señalización y medidas de seguridad. Todo esto es parte de la infraestructura fundamental para la instalación de la segunda planta de celulosa de UPM en el centro del país.

En tanto, Alejandro Ruibal, director de Saceem, dijo en rueda de prensa que se trata de un “proyecto muy importante que puede emplear a más de 2.000 personas” durante todo el proceso. El consorcio conformado por cuatro empresas tiene 33% de componente local y las dos empresas europeas tienen experiencia en el sector ferroviario. “La idea es trabajar en simultáneo en muchos frentes”, dijo Ruibal.

Al ser un proyecto de participación público privada (PPP), el ganador de la licitación deberá conseguir el financiamiento de la obra, ejecutarla y una vez que este finalizada el Estado comenzará a pagarle por disponibilidad de infraestructura. “Recién dentro de tres o cuatro años vamos a empezar a cobrar”, agregó.

Ferrocarril Central es una de las obras de infraestructura más importantes para concretar la segunda planta de celulosa de UPM en Uruguay.  El inicio de las obras forma parte de la segunda fase de la negociación con la multinacional finlandesa.

Por otra parte, consultado por El Observador, el director de desarrollo de negocios de UPM, Gonzalo Giambruno, dijo que las negociaciones son un proceso de largo plazo y a planificación a futuro, por lo que se esta en etapa de implementar lo que se acordó en la hoja de ruta que fue el acuerdo de inversión.    

“Las conversaciones con el gobierno terminaron el 7 de noviembre y ahora estamos en plena implementación, realizando estudios de pre ingeniería, de gestión de autorizaciones para comenzar a operar y el desarrollo de las infraestructuras necesarias. Desde la empresa se tiene confianza de que el calendario establecido avanza desde el punto de vista del proceso y de la sustancia, con hitos intermedios que se han ido cumpliendo”, explicó.

El ejecutivo agregó que en abril se dio una instancia en que la compañía pudo acreditar que los requisitos se han ido cumpliendo satisfactoriamente, y adelantó que en un par de semanas tendrá lugar una nueva instancia para ver “como se viene avanzando”.

“UPM es una empresa internacional que cotiza en bolsa, por lo que para tomar una resolución de esta magnitud tiene un proceso formal que está definido. Se elevará al directorio y deberá contar con determinados elementos para ser aprobada la inversión. El mandato para lo que estamos en Uruguay es seguir trabajando de acuerdo a esa hoja de ruta”, dijo.
Sobre el impacto ambiental que puede tener la instalación de una planta sobre el Río Negro, Giambruno apuntó que los datos concretos van a estar cuando el estudio de impacto ambiental estén culminados. “Lo que ya sabemos es que con esta especie (eucalipto) y con esta tecnología y forma de operar el comportamiento ambiental ha sido superior”, dijo.

Diario EL OBSERVADOR - Montevideo - URUGUAY - 05 setiembre 2018