BOSQUESEl valor de proteger los bosques

Análisis de FAO. Encontrar la manera de aumentar la producción agrícola y mejorar la seguridad alimentaria sin reducir la superficie forestal es uno de los mayores problemas. Ese concepto es uno de los expuestos en un trabajo de la FAO, El estado de los bosques del mundo - Las vías forestales hacia el desarrollo sostenible, remitido a El Observador desde dicha agencia de las Naciones Unidas.

En el trabajo se destaca, además, que la calidad del agua, imprescindible para la salud y la vida de las poblaciones rurales y urbanas, está directamente relacionada con la gestión forestal.

 

También que la modernización del sector energético forestal tradicional ofrece la posibilidad de mejorar los medios de vida, crear cadenas de valor sostenibles y liberar recursos para realizar inversiones en la gestión forestal sostenible.

Los bosques y los árboles, se indica, brindan beneficios importantes a las personas como al planeta al fortalecer los medios de vida, suministrar aire y agua limpios, conservar la biodiversidad y responder al cambio climático.

El documento extiende un conjunto de mensajes clave, entre ellos que si queremos lograr nuestros objetivos mundiales es necesario adoptar medidas urgentes para conservar los bosques del planeta, porque se está acabando el tiempo y la superficie total de bosques disminuye cada día.

Otros mensajes son: es hora de reconocer que la seguridad alimentaria, la agricultura y el sector forestal no pueden seguir abordándose por separado; para llegar primero a los más vulnerables es necesario seguir la vía forestal y empoderar a los agentes del cambio; los enfoques territoriales equilibran la sostenibilidad; las políticas coherentes fomentan las asociaciones y la participación de las partes interesadas en los bosques; y las ciudades sanas necesitan árboles. l

Las claves
Los bosques y los árboles proporcionan en torno al 20% de los ingresos de los hogares rurales en los países en desarrollo, ya sea a través de ingresos monetarios o satisfaciendo las necesidades de subsistencia.

En 2015 el 25% de los bosques del mundo se gestionaba con el objetivo de conservar el suelo y el agua. La superficie de bosques destinados a dicho objetivo ha aumentado en los últimos 25 años.

Los bosques suministran aproximadamente el 40% de la energía renovable mundial en forma de dendrocombustible. Esto equivale a la energía solar, la hidroeléctrica y la eólica juntas.

En 2016 aproximadamente el 38% de la madera en rollo de uso industrial estaba certificada y producida de manera sostenible.
A finales de 2017 en torno a 120 países se habían comprometido a tomar medidas forestales de mitigación y adaptación al cambio climático.

Diario EL OBSERVADOR - Montevideo - URUGUAY - 06 julio 2018