intendente Enrique AntíaAntía: "Falta una tercera vía en el Partido Nacional para ganar la elección"

Dice que no tiene enemigos, pero que alguna vez lo han traicionado.

NICOLÁS GONZÁLEZ KEUSSEIAN
El dos veces intendente de Maldonado, Enrique Antía, no solo logró en tres años de gestión disminuir los índices de delitos, sino que suena cada vez más fuerte como uno de los líderes del denominado Grupo de los Intendentes, una tercera opción dentro del Partido Nacional de cara a las elecciones nacionales que busca asumir las necesidades de la ciudadanía en el interior.

—Uno de sus lemas de campaña fue "Vuelve Antía, vuelve la seguridad". ¿Cuál es el balance a tres años?

 

—Sabíamos que Maldonado precisaba un cambio de rumbo en materia de seguridad, que había grandes problemas de desocupación y que se venían problemas mayores. Empezamos a tomar medidas rápidamente para poder actuar en esas áreas, por ejemplo, con la instalación del centro de monitoreo de seguridad de Maldonado que fue exitoso.

—¿Se siente relegado a la hora de pedir recursos al gobierno central?

—Las transferencias que llegan del gobierno al interior siempre son inferiores que los recursos que salen del interior al gobierno nacional. No han entendido bien a nivel nacional lo que significa respaldar determinadas políticas a nivel de turismo cuando le reclamamos apoyo a nivel nacional en materia de eventos, por ejemplo.

—¿Por qué le dicen que no, porque es del Partido Nacional?

—No, porque no han comprendido el valor de lo que significa la política de eventos en el desarrollo turístico nacional. Si no, estarían poniendo recursos para la Fórmula E.

—¿Tiene enemigos?

—No tengo enemigos, quizás alguno cree que es enemigo mío. Ni siquiera con aquellos que en alguna época me han traicionado. Soy amigo de la gente.

—¿Quién lo traicionó?

—Y bueno, yo tuve dirigentes que al tiempo de agarrar el cargo se fueron. Me traicionaron políticamente y sin embargo hoy estoy hablando con ellos. Soy buen cristiano, siempre tengo el perdón por delante. Algunos adversarios políticos sí tengo.

—¿El exintendente de Maldonado Óscar de los Santos es hoy su principal adversario político?

—Él cree que es el principal. Está siempre en contra de todo.

—¿En qué quedaron al final las denuncias penales contra la administración De los Santos?

—Ese es un tema que me tiene bastante preocupado. Hicimos cuatro denuncias penales hace dos años, debidamente fundamentadas, y solo en una de ellas hubo citaciones. Estamos hablando de dos años. hasta ahora no he hablado porque entendía que no debía hablar de algo que estaba en la Justicia, pero ya he perdido la paciencia. Fíjese, una de las denuncias tiene que ver con un terreno que estaba a la venta en menos de 200 mil dólares y sin razones justificadas, sin informes técnicos y sin participación de las organizaciones competentes, aparece la intendencia comprándolo en 2 millones de dólares. Sale de la venta y aparece sin llamado de licitación como por arte de magia vendido en 2 millones de dólares. Al final una de las personas citadas a declarar, los abogados presentan que tiene trastornos cognitivos.

—¿De 2015 a 2016 el Tribunal de Cuentas de la República (TCR) observó en 14 oportunidades los contratos con la Fundación A Ganar. ¿Por qué se pagaron más de 5 millones de dólares a esa organización cuestionada por ediles del FA?

—Cuando llegamos había todo un sistema organizado por la intendencia con oenegés que le transferían dinero y administraban recursos de la intendencia. Nosotros apoyamos porque tiene años de trabajo con el gobierno nacional y experiencia de trabajo. Las observadas fueron las iniciales, las abreviadas, cuando se terminaban las reiterábamos porque estaban funcionando bien. Resolvimos hacer una licitación pública y la que ganó por lejos fue ella porque ofrecía servicios más baratos.

—¿Usted entregó viviendas en comodato a militantes del Partido Nacional según denuncian los ediles del FA?

—Están cuestionando una o dos viviendas en cientos que entregamos, problema de ellos. Nosotros debemos haber entregado unas 200 y pico de viviendas que ya habían sido adjudicadas por el FA. No revisamos ninguna de las adjudicaciones, ahora bastó que hubiera dos personas que le entregáramos la vivienda con informe social correspondiente, para que armaran la denuncia.

—¿Descendió la cifra de delitos con las cámaras de videovigilancia?

—El primer año un 32% en rapiñas y un 54% en arrebatos.

—¿Siente que es hora de que los gobiernos comunales se hagan cargo del problema de la inseguridad?

—En Maldonado sí. La inversión que nosotros hicimos para aportar a la seguridad es fundamental para defender el destino turístico y el trabajo. Si perdíamos la seguridad perdíamos todo. El gobierno nacional había decidido solo implementar 40 cámaras en todo el departamento, nosotros salimos con la propuesta de 1.200.

—El ministro del Interior confirmó esta semana el aumento de la cifra de los delitos. ¿Fracasó el gobierno en el combate al problema de la inseguridad?

—Y yo creo que ha errado el camino. Por más armas, equipamiento y sueldos, si no hay una gestión que respalde eso, no se va a resolver, falta respaldo para los militares y para los policías en su accionar. Están faltando cambios en las leyes para dar más seguridad. Acá hay que hacer una coordinación mucho más efectiva entre el Poder Judicial, la Fiscalía y la Policía, (su falta) hoy está jugando en contra. Acá tampoco alcanza con salir a buscar firmas para tres o cuatro cosas puntuales, si bien hay algunas cosas que comparto como la posibilidad de acceder por la noche para el combate a fondo de la pasta base. Si dejamos avanzar esto podríamos terminar, como dijo Mario Layera, como en Centroamérica.

—¿Está bien que los vecinos salgan a patrullar las calles?

—Es muy riesgoso eso. No estoy de acuerdo. En Maldonado hay cosas interesantes con los vecinos en WhatsApp que junto a la comisaría se transforman en un policía más en la custodia; son experiencias necesarias para ponerlas a evaluar y tomar una acción.

—¿Entonces la propuesta del senador Jorge Larrañaga para convocar a los militares no la firma?

—No porque si mañana tengo que invitar a una mesa grande para buscar acuerdos, no puedo excluirlos.

—¿En qué lugar de la administración se ve en 2020?

—Yo me veo en un país que empiece a cambiar.

—¿Qué pasa en el Partido Nacional que no logra subir más del 30% de las preferencias en las encuestas públicas?

—Veo un Partido Nacional que puede ser gobierno, que tiene altas posibilidades y que va a tener una interna competitiva. Hoy con dos candidaturas, de buenos amigos, de buenos dirigentes, veo que —con el mayor de los respetos— creo que nos está faltando algo más para poder acceder al gobierno.

—¿Qué es ese "algo más"?

—Y bueno, hay un montón de vecinos, no quiero decir blancos, que les gustaría que haya una tercera vía en el Partido Nacional. Y esa vía puede ayudar a que el Partido Nacional consiga ese porcentaje adicional que precisa para ser mayoría y poder acceder al gobierno en un balotaje con el Frente. Hay un fracaso en estos 15 años de gobierno del FA, hay un fracaso en lo prometido, en todos los índices se está fracasando.

—¿Perdió liderazgo Larrañaga?

—Él tiene liderazgo de un sector.

—¿Cuándo definen quién será el líder de esta nueva tercera opción?

—Es una cosa distinta. Los líderes no se deciden, se construyen con los años y los liderazgos se ganan o se pierden. Acá no pretendemos ser líderes. Será tras el Mundial.

—Muchos manejan su nombre, por eso le pregunto.

—Ninguno pretende ser líder. Sí integrar un grupo que pueda decidir en la vida pública y ayudar al Partido Nacional a ser gobierno. Nosotros pretendemos algo mucho más horizontal.

—¿Irán por la senadora Verónica Alonso?

—De ninguna manera, pero nos encantaría trabajar junto a ella. Si logramos cristalizar un acuerdo sería un acuerdo político, no una absorción de su sector, ni de ella a nosotros.

—¿Está desgastada la imagen del presidente Vázquez a tres períodos de gobierno del FA?

—Yo creo que no. No tuvo el respaldo suficiente. Vázquez estuvo muy solo en este último período; lo veo muy solo, como que le pintaron las cosas de otro color; le pintaron una economía mejor que la que estaba y le pintaron una relación del país diferente.
"Maldonado va a generar más trabajo que UPM"

— Usted dijo que el gobierno debería poner más atención a las inversiones en Maldonado porque suponen un escenario mejor incluso que el de la eventual nueva planta de UPM.

—Se votaron más de 40 proyectos que van a generar 1 millón 200 mil metros cuadrados de obra para los próximos cuatro años. Es mucha obra, es récord en obras, que van a ir escalonadamente apareciendo. Y eso es lo que nos lleva a hablar de la importancia del valor de esa inversión que va a generar más puestos de trabajo que UPM a nivel nacional durante la construcción, pero sobre todo la experiencia nos muestra que generan ocupación permanente de mano de obra comparable. Toda esta inversión de concretarse, salvo cuatro obras, todas las demás están en marcha, va a haber más de 40 obras en marcha, cómodamente vamos a duplicar el trabajo permanente de lo que se genera por UPM a nivel nacional a futuro, también en el valor a la hora de la obra. Todo esto va a generar algo así como ocho millones de jornales. En el otro gobierno se aprobaron unos 20 proyectos de obra, de características especiales, están todos hechos. Agarrando los 10 más importantes, hoy esos 10 contribuyen anualmente con una cifra de impuestos superior a todo el ingreso que uno puede conseguir. Es muy importante esto. El aporte es como Pan de Azúcar y Solís, 10 de esos nada más, estamos hablando de seis millones de dólares por año, más lo que pagan en BPS, más lo que pagan de impuestos y diez de esos ocupan durante el invierno unas 800 personas más y en verano 1.400, promedio de 100. Diez de esos es una UPM. Y no es que estemos en contra, estamos a favor, pero lo que estamos haciendo es darle las exoneraciones tributarias, no le estamos haciendo ni carreteras ni vías férreas.
"La situación económica argentina impactará en el turismo"

—¿Cómo puede impactar la situación económica argentina en el turismo nacional y más que nada en Maldonado?

—Nosotros en Uruguay somos "argentinodependientes" en materia de turismo. Antes éramos dependientes de Argentina y Brasil, pero no solo en turismo, sino en toda la economía. Hoy estamos más sueltos, pero si Argentina se resfría capaz que nosotros nos agarramos una congestión. Por suerte la apertura que hizo Argentina hacia Uruguay en los últimos años generó un nuevo empuje en materia de turismo y de inversión; de hecho las inversiones en mayor parte son de inversores argentinos. El blanqueo de los capitales argentinos nos jugó en contra. Fue como renovar la libreta de matrimonio ahí. Y le dio crecimiento a futuro, creo que esto hay que ser prudente. Por lo pronto va a obligar al gobierno nacional a devolverle al sector turístico los descuentos del IVA, que los quitó en un momento que tenía que haberlo mantenido y ahora va a tener que ponerlo de nuevo, si no sería una muy mala señal.

—¿Le preocupó el rechazo de vecinos y hasta dirigentes como Esteban Valenti o Arturo Heber a la eventual altura del proyecto ya desestimado del Hotel San Rafael?

—Heber, que no era diputado en esa época y los amigos de Valenti, diputados y senadores, me acuerdo que hicieron una quema de cubiertas y un piquete cuando hicimos la doble vía en la Barra de Manantiales diciendo que se iba a terminar la Barra de Manantiales. Una obra que ha sido un éxito para el desarrollo de la zona. Que se iba a dejar de ver las estrellas. Son datos de la realidad. Los mismos que hoy estaban en contra sin conocer el proyecto, en contra a muerte de la inversión en el Hotel San Rafael. Hay gente que está siempre en contra y así el país no avanza.

Diario EL PAIS - Montevideo - URUGUAY - 24 junio 2018