ferrocarrilFerrocarril: buscan inversores en Japón

Uruguay XXI en Tokio presentó proyecto de modernización

El ambicioso plan ferroviario que Uruguay llevará adelante para que UPM instale otra planta fue presentado ayer en Tokio, en un evento de inversión en infraestructuras hasta el que ha acudido en busca de inversores.

Uruguay cuenta con una red ferroviaria de unos 3.000 kilómetros creada principalmente con inversión británica en el siglo XIX que se está reconstruyendo, y supone "una importante conexión sobre todo con Argentina y Brasil", explicó ayer a la agencia española Efe Juan Sánchez Loppacher, del instituto de promoción de inversiones y exportaciones, Uruguay XXI.

 

Este acondicionamiento del ferrocarril es un punto clave en las negociaciones de instalación en territorio uruguayo de una segunda planta de fabricación de celulosa de la empresa finlandesa UPM, que impli-ca una inversión del Estado uruguayo de alrededor de US$ 1.000 millones para mejorar la infraestructura vial y ferroviaria del país.

Este nuevo proyecto de la finlandesa, así como la proyección de la apertura de otras fábricas, "requiere una gran red de transporte, lo que sumado al crecimiento en el sector agropecuario exige la puesta a punto de infraestructuras de alto nivel", expuso Sánchez.

Además de esa cantidad, el Ejecutivo uruguayo ha aprobado una licitación de US$ 350 millones para la construcción de puentes, mejoras portuarias y las estructuras varias complementarias que refuercen la conexión con el ferrocarril.

Así lo explicó ayer el representante de Uruguay XXI durante la cuarta Cumbre de Inversión en Infraestructura de la capital nipona, donde "se han hecho contactos interesados con el proyecto y en los próximos días se presentará en profundidad a empresas locales".

Hasta ahora se interesaron en el proyecto empresas españolas, alemanas, francesas, italianas, chinas y africanas.

Sánchez destacó la buena situación geográfica de Uruguay dentro del Mercosur y las facilidades para las compañías a la hora de exportar productos hacia el resto de países que lo componen (Argentina, Brasil y Paraguay).

También defendió la capacidad de adaptación del país tras las crisis que afectó en los 90 a Brasil y en los 2000 a Argentina, que "nos afectó mucho y nos hizo perder mercado" sin que, sin embargo, la economía uruguaya se contrajera.

Este "crecimiento económico sostenible de Uruguay lo convierte en un marco de inversiones de menor riesgo, lo que nos permite salir a ofrecer la participación de empresas extranjeras", dijo Sánchez.

Diario EL PAIS- Montevideo - URUGUAY - 21 abril 2018