celulosa microfibriladaLa ciencia convierte en útil lo usado

El Programa de Celulosa y Papel (PROCYP) del Instituto de Materiales de Misiones viene desarrollando un proyecto de investigación desde hace más de 20 años con la intención de descubrir biomateriales que se pueden producir a partir de la madera, como bioplásticos para impresiones 3D, nanocelulosa para reforzar papeles de embalaje, vainilla para uso en repostería o hidrogeles para la industria cosmética.

“Los biomateriales son productos sólidos, como la nanocelulosa, la celulosa microfibrilada, las pulpas de disolución, que son pulpas de celulosa que se pueden disolver para fabricar viscosa, una fibra textil.

La madera, principalmente la de estas especies leñosas, son fuente de una variedad innumerable de productos”, declaró María Cristina Area, directora del PROCYP al sitio web oficial del CONICET, en referencia a la riqueza forestal que posee la provincia de Misiones donde hay más de 300 mil hectáreas cultivadas con distintas especies leñosas.

“En Misiones y Corrientes, una de las especies más plantadas es el pino y su aserrín es una materia muy abundante. Es un residuo que genera la industria forestal, que se podría aprovechar de manera integrada con otras industrias”, añadió una de las integrantes de esta línea de estudio que es única en el mundo debido a las particularidades que presentan las dos especies de pino que existen en Argentina.

Nanci Ehman, becaria doctoral en el instituto nombrado, detalló el trabajo actual que están realizando para lograr fabricar un hidrogel de nanocelulosa que permitirá obtener mayor resistencia en papeles de embalaje.”Estamos probando distintos métodos para aprobar el hidrogel, en distintos momentos de la fabricación del papel, analizando en qué instancia se obtiene mayor resistencia”.

Area, por su parte, agregó que para este 2018 tienen “varias ideas, que van desde repelentes hasta alcohol en gel y otro tipo de cremas”.

LA ARENA - La Pampa - ARGENTINA - 26 febrero 2018