Melo piquetero CaruMelo acusa de “desinformar” al titular argentino de la CARU

“El fallo de La Haya no ordenó el monitoreo de la boca del río Gualeguaychú, como dijo Mauro Vazón”, disparó el ex Delegado en el Puente Internacional.

Contaminación
El ex Delegado de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU), Horacio Melo, dijo en RADIO MÁXIMA que está “muy molesto” con el presidente de la Delegación Argentina, Mauro Vazón “porque desconoce el fallo de La Haya. Vazón dice que La Haya ordenó el monitoreo del río Gualeguaychú,  y eso es mal informar o desinformar”, manifestó.
 
Melo, al referirse a unas recientes declaraciones de Vazón, sostuvo que “estoy muy molesto por las palabras vertidas por el actual presidente argentino de la CARU, donde manifiesta un total desconocimiento –desconozco si es intencionado o no-  del fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya. En primer lugar, sería recomendable que el doctor Mauro Vazón lea las extensas manifestaciones que están en las Actas de la CARU desde el año 2006 hasta diciembre de 2015, donde constan todas las posturas del Estado Argentino.

En segundo término, el presidente argentino de la CARU debería leer el párrafo 281 del fallo del Tribunal de La Haya, donde exclusivamente habla del monitoreo de la planta de UPM ex Botnia. Vazón dice que el fallo ordenó la realización del monitoreo de la desembocadura del río Gualeguaychú y de todo el río Uruguay. Eso es malinformar o desinformar”.


Asimismo, Melo adujo que “además Vazón debería saber que el monitoreo general del río Uruguay está dentro de las funciones de la CARU, de acuerdo al artículo 56 del Estatuto, algo que se hizo entre 1987 y 2004 a través de los llamados ‘Estudios PROCOM, que monitoreaban todo el curso del río Uruguay. Por el conflicto y por detectar alguna manipulación en los resultados de los análisis sobre el fósforo, la CARU detuvo los PROCOM desde 2005 y hasta no cumplir como correspondía los controles a la planta de UPM de Fray Bentos”.

Según el ex Delegado argentino en la CARU, “las negociaciones del presidente Macri en primera instancia, la mala información de Vazón y las pretensiones de Uruguay de tratar de diluir el impacto ambiental de UPM Botnia con el monitoreo general del río Uruguay no corresponde. Por otra parte, el monitoreo de la desembocadura del río Gualeguaychú fue acordado luego de las reuniones entre los Cancilleres y los ya ex presidentes Mujica y Fernández de Kirchner, porque lamentablemente habíamos fracasado en la CARU al exigir el monitoreo a UPM según el fallo de La Haya. Esto sucedió así porque Uruguay se opuso rotundamente a que argentinos ingresaran a la planta. Uruguay siempre pretendió hacer un monitoreo en la zona de influencia externa a la pastera, pero les molestó siempre y les molesta que argentinos entraran a las instalaciones de UPM. Hasta diciembre de 2015, los vehículos oficiales de la CARU argentina no podían ingresar a la planta, había que hacerlo en coches de la CARU Uruguay”.

Cuando se lo interpeló acerca de la responsabilidad del anterior Gobierno nacional en el hecho de disponer el monitoreo de la boca del Gualeguaychú, Melo sostuvo que “es verdad que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner introdujo el monitoreo de la desembocadura del río Gualeguaychú como una concesión, pero desde el punto de vista técnico era aconsejable porque la bahía del Ñandubaysal no solo recibe los efluentes de UPM sino también los que aporta el río Gualeguaychú”.

Melo reveló que en un determinado momento, “Uruguay pretendió monitorear las industrias del Parque Industrial de Gualeguaychú, a lo cual obviamente nunca se accedió. Por eso, en base a lo que está en el Estatuto y en el Digesto sobre el Uso y Aprovechamiento del río Uruguay, para la CARU las desembocaduras de los afluentes son considerados efluentes y a Uruguay y Argentina les corresponde hacer la utilización sustentable de sus ríos en sus territorios para que no afecte el Uruguay”.

Respecto de la posible derogación de la llamada ley de la madera, Melo manifestó que “se enmarca dentro del contexto de las políticas nacionales. A Mauricio Macri, desde su primera conversación con Tabaré Vázquez, está claro que le interesa más la cuestión comercial y la apertura de la economía que el cuidado del ambiente. Y lo mismo ocurre en Entre Ríos ahora con la ley de la madera, donde hay un descenso marcado de la producción de pollos, cítricos, la construcción. Al Gobernador se le ha venido abajo la producción, el empleo y, alarmado por las dañinas corporaciones forestales es lógico que quiera acabar con la ley. Máxime cuando no existe un convencimiento genuino acerca de la preservación del ambiente y la salud”.

Radio MAXIMA - Gualeguaychu - ARGENTINA - 20 octubre 2016