Uruguay busca en Tokio inversión para su ambicioso saneamiento ferroviario

El ambicioso saneamiento ferroviario de Uruguay es la principal apuesta que el país latinoamericano defendió hoy en un evento de inversión en infraestructuras en Tokio hasta el que ha acudido para presentar sus proyectos en curso.

Uruguay cuenta con una red ferroviaria de unos 3.000 kilómetros creada principalmente con inversión británica que se está reconstruyendo, y supone "una importante conexión sobre todo con Argentina y Brasil", explicó hoy a Efe Juan Sánchez Loppacher, del Instituto de promoción de inversiones y exportaciones, Uruguay XXI.

Este acondicionamiento del ferrocarril es un punto clave en las negociaciones de apertura en aquel país de una segunda planta de celulosa de la empresa finlandesa UPM, que ha exigido la garantía de unos 1.000 millones de dólares (810 millones de dólares), en su mayoría para restaurar la red de este transporte.

Este nuevo proyecto de la finlandesa, así como la proyección de la apertura de otras fábricas, "requiere una gran red de transporte, lo que sumado al crecimiento en el sector agropecuario exige la puesta a punto de infraestructuras de alto nivel", expuso Sánchez.

Además de esa cantidad, el Ejecutivo uruguayo ha aprobado una licitación de 350 millones de dólares para la construcción de puentes, mejoras portuarias y las estructuras viarias complementarias que refuercen la conexión con el ferrocarril.

Así lo explicó hoy el representante de Uruguay XXI durante la cuarta Cumbre de Inversión en Infraestructura de la capital nipona, donde "se han hecho contactos interesados con el proyecto y en los próximos días se presentará en profundidad a empresas locales".

Sánchez destacó la buena situación geográfica de Urugay dentro del Mercado Común del Sur (Mercosur) y las facilidades para las compañías a la hora de exportar productos hacia el resto de países que lo componen (Argentina, Brasil y Paraguay).

También defendió la capacidad de adaptación del país tras las crisis que afectaron en los 90 a Brasil y en los 2000 a Argentina, que "nos afectó mucho y nos hizo perder mercado" sin que, sin embargo, la economía uruguaya se contrajera.

Este "crecimiento económico sostenible de Uruguay lo convierte en un marco de inversiones de menor riesgo, lo que nos permite salir a ofrecer la participación de empresas extranjeras", dijo Sánchez. EFECOM

FINANZAS.com ESPAÑA 20 abril 2018